PIZZA DE HARINA DE GARBANZO
Buenas a tod@s! Os traigo una receta de pizza sin gluten y de fácil digestión. Todo esto viene porque en mi casa el viernes noche toca pizza casera. Es como un ritual que marca el inicio del fin de semana que reúne a familia y amigos en la cocina. Pero a mi me sienta muy pesado el trigo y me tiro toda la noche durmiendo fatal intentando digerirlo. Durante un tiempo me excluí de la tradición del viernes de pizza por salud pero no es lo mismo. No es solo la pizza, es el ritual que le acompaña. Por ello me puse a probar maneras resultonas y RÁPIDAS de poder disfrutar de algo similar a una pizza. Insisto en lo de rápido porque ante todo priorizo la practicidad para asegurarme que lo voy a hacer en el día a día.
Esta sencilla receta queda con el borde crujiente, aguanta bien el relleno y es tan fácil que se puede hacer a todas horas, para desayunar, comer o cenar. Ideal también si eres celíaco, intolerante al gluten o si te viene a visitar ese amig@ o familiar que no puede comer gluten. No obstante, ya hemos comentado en posts anteriores que Kapha está aumentando en primavera así que darle trigo no es buena idea, esta alternativa a base de legumbre puede ser un buen sustituto.
INGREDIENTES para una pizza pequeña
3/4 taza de harina de garbanzo
1 cucharadita de aceite de oliva
una pizca de sal
agua
Comenzamos colocando la harina en un bol, añadimos el aceite y la sal. El truco ahora es añadir el agua poco a poco hasta formar una masa cremosa. Ni muy líquida, ni grumosa. Es truco es ir mezclando con unas barillas hasta que adquiera la consistencia de unas natillas. Una vez has logrado esta consistencia, sería conveniente dejarla reposar una hora o más, pero si no dispones de ese tiempo no importa, sigue con la receta. Es bueno adelantarse y dejar varias raciones de esta masa en la nevera para poder hacer la pizza cuando nos resulte útil.
Para darle forma de pizza, ponemos una sartén antiadherente a calentar a fuego medio. Es importante que siga siendo antiadherente y no se pegue. La engrasamos bien y añadimos la mezcla de la masa de pizza. Con una espátula repartimos bien la masa por la sartén dándole una forma redonda.
Dejamos que se cocine durante unos 5 minutos aproximadamente y le damos la vuelta. Dejamos que se cocine de 3 a 4 minutos más. Una vez tienes la base hecha simplemente rellénala con tus ingredientes favoritos y métela al horno para que los bordes acaben de tostarse y los ingredientes de doren.
Ahora, si no tienes tiempo de meterla al horno simplemente al darle la vuelta en la sartén pon tus ingredientes favoritos y tápala hasta que se dore bien por abajo y se funda el queso (si le has puesto). Si el fuego es fuerte bájalo un poco para que no se queme antes de que se funda el queso.
Y ya está lista, es muy sencillo. Te recomiendo que uses ingredientes jugosos ya que la masa es un poco seca por ser a base de legumbre. Espero que la disfrutes!
[…] ya la postee hace un tiempo. Os enlazo a la receta (aquí). A ver… el garbanzo es secote, por lo que la pizza también lo es. Por ello es bueno ponerle […]
[…] ya la postee hace un tiempo. Os enlazo a la receta (aquí). A ver… el garbanzo es secote, por lo que la pizza también lo es. Por ello es bueno ponerle […]